¿Cómo es posible que hayas compartido horas y horas conmigo en LASA y que ahora me caracterices, justamente por lo que allí dije, no como alguien con quien estás en desacuerdo, sino como autor de un «libelo» escrito «para escalar posiciones»? ¿No te das cuenta acaso de la inaceptable doblez moral implícita en sostener ambas actitudes simultáneamente? ¿De la deshonestidad atroz que supone atacar a quien no puede responderte debido a la censura? Subrayo que no te estoy hablando de política, terreno en el que doy por descontadas nuestras radicales discrepancias y en el que no podrás escudarte para justificar tu actitud, ya que esas discrepancias existían también en Miami. Te estoy hablando de la falta de probidad intelectual y de la doblez moral de que has hecho gala; te estoy hablando, también, de la amistad, algo tan transparente e imprescindible como el aire, que con tu actitud has roto para siempre entre nosotros.
(Carta abierta a Aurelio Alonso, Encuentro de la cultura cubana, No. 18, 2000)
No comments:
Post a Comment