Entre museos, libre y elegantemente tumbado en el confortable lecho de un
hotel en Gran Vía, leo una entrevista con Norberto Fuentes. Fuentes se cree un
personaje porque medró algunos años a la sombra de su amo Fidel y se codeó con
un grupo de matones chucheros, pero no es más que uno que aspiró a James Bond y
apenas llegó a ser un arlequín bananero.
Norberto Fuentes es el Hombre Nuevo Cubano. Grosero, chabacano,
oportunista, bravucón, pero sobre todo es un hombre enamorado de Fidel Castro.
Ha dedicado miles de páginas a tratar de ser Fidel Castro, sin éxito. ¿Qué
mayor prueba de amor? Amor viril, supongo.
(Blog Emanaciones, noviembre 2015)
No comments:
Post a Comment